LA IMPORTANCIA DE LA VITAMINA B
Y NUESTRO SISTEMA NERVIOSO
Existe un grupo de nutrientes esenciales para nuestro cuerpo que tienen una gran variedad de funciones y juega un papel crucial en el sistema nervioso; estas sustancias son las vitaminas B. Existen ocho tipos de vitamina B: Vitamina B1, Vitamina B2, Vitamina B3, Vitamina B5, Vitamina B6, VitaminaB7, Vitamina B9 y Vitamina B12, cada una diferente, pero con funciones iguales de importantes para nuestro organismo.
Los mamíferos no podemos sintetizar vitaminas B por nuestra cuenta; por lo tanto, se debe incorporar en cantidades suficientes con la dieta. La mayoría de las vitaminas B a excepción de la B12 se pueden obtener al ingerir productos de origen vegetal, aunque se puede obtener a través de otras fuentes de alimentos como carne, lácteos y huevos.
En general las Vitaminas B cumplen la función de llevar a cabo reacciones enzimáticas, pero algunas de estas vitaminas no solo contribuyen con ese rol, sino que también poseen funciones neuroespesificas, comúnmente se les conoce como Vitaminas B “neurotrópicas”. En particular, la vitamina B1 (tiamina), B6 (piridoxina) y B12 (cobalamina) contribuyen esencialmente al mantenimiento de un sistema nervioso saludable. Su importancia se destaca por muchas enfermedades neurológicas relacionadas con deficiencias en una o más de estas vitaminas, pero pueden mejorar ciertas condiciones neurológicas.
Se ha encontrado una asociación significativa entre el deterioro cognitivo y los bajos niveles de vitamina B6 y B12. El problema radica en que una proporción significativa de la población sufre de deficiencias e insuficiencias de una o más de estas vitaminas B neurotrópicas.
Llevando esto a un contexto de trastornos neurológicos implica aumento en enfermedades de este tipo, como encefalopatía de Wernicke, la depresión, el beriberi, convulsiones, degeneración combinada subaguda de la médula espinal o la neuropatía periférica (NP), que están relacionadas con una deficiencia en una o más de estas vitaminas B neurotrópicas.
Por el contrario, la ingesta de estas vitaminas puede mejorar ciertas condiciones neurológicas incluso aunque no exista una deficiencia, por lo que varios informes ven con buenos ojos la suplementación especifica con la combinación de vitaminas B1, B6 y B12 lo cual puede ayudar a mejorar la neuropatía, el control motriz, el dolor generalizado de tejidos etc.
Por estas razones es importante conocer como se encuentra nuestro cuerpo, una tendencia genética a deficiencia de alguna de estas vitaminas aumenta las posibilidades de padecer alguno de estos trastornos neurológicos, en estos casos una simple prueba podría darte mucha información y ayudarte a prevenir y mejorar tu salud.
Autor: QBC Eduardo Martinez
Bibliografía
Calderón-Ospina, CA, & Nava-Mesa, MO (2020). Vitaminas B en el sistema nervioso: conocimiento actual de los modos de acción bioquímicos y sinergias de tiamina, piridoxina y cobalamina. Neuroscience y terapéutica del SNC , 26 (1), 5–13. https://doi.org/10.1111/cns.13207